El año pasado por estas fechas plantamos unos cuantos frutales y este año hemos repetido: melocotoneros, perales, manzaneras, almendros, cerezos… hasta un albaricoquero! y los peques quisieron coger también un par de matas de fresas.

H. se puso todo el equipo de jardinería que le regaló su tía de Suiza para su tercer cumpleaños.

Al acabar pintamos unas cuantas piedras con dibujos de fresitas para acordarnos de lo que habíamos plantado y también preparamos unos carteles con ramas.

A ver si tenemos suerte y los perros (en plural porque acabamos de adoptar un cachorrillo que andaba abandonado por aquí) no nos las tocan pues las he puesto en una zona de las que a ellos «les gusta».