Pan de apio y queso. Y sí, se que lo del apio suena un poco… ¿raro? Ya está aquí la loca de las plantas que le mete apio hasta al pan… pero prometo que es muy, muy rico. Más que un pan, es un pastel salado pues no necesita amasados ni preparaciones especiales. Lluc aprendió la receta de su amigo Robin, que un día se trajo un pan de estos a nuestros encuentros en el bosque.

INGREDIENTES

• 100g de tallo de apio (unos 30-40cm de tallo)
• 250g de harina normal o de repostería
• medio sobre de levadura
• una cucharadita de sal
• 50g de mantequilla
• 100g de queso rallado (nosotros rallamos cheddar)
• 1 huevo
• 100ml de leche (animal o vegetal)

 

Procedimiento

1. Primero troceamos el apio a taquitos muy pequeñitos (brunoise).

2. En un bol, mezclamos la harina, la levadura, la sal y la mantequila. Usamos las manos para que la mantequilla quede bien mezclada con el resto.

3. Añadimos el apio y el queso.

4. En otro bol pequeño batimos el huevo y mezclamos la leche y lo añadimos todo en el bol grande. Se mezcla todo bien. No hace falta amasar ni nada.

5. Por último ponemos la mezcla en un molde (nosotros usamos de los típicos rectangulares pero os sirve cualquier cosa que se pueda meter en el horno: molde de pastel, de cristal pyrex…) y lo horneamos 50 minutos a 190°C. Cada horno es un poco diferente así que vale la pena ir comprobando la primera vez que lo hacéis 😉

Y ¡a disfrutarlo! Se puede comer caliente o frío. Hoy me lo he comido (el trocín que me ha quedado) con sopa de calabacín.