Mi madre tiene muchísimo bambú en su jardín y un día que tenía que hacer «limipeza» de una zona, me quedé las cañas y decidí cortaras en tramos cortitos para preparar una casita para insectos.

 
La verdad es que la madera de bambú es de lo más agradable pues hace un ruido muy bonito. A los peques les gusta mucho usarlo para hacer xilófonos y hacer música.
Aquí tenéis la casita de insectos que esperamos que pronto esté bien llena y nuestro jardín muy polinizado.