Estas Navidades volvemos a Lleida y Barcelona a ver a la familia y estamos preparando algunos regalitos. Hacía muchísimo que compré plástico mágico o «shrinking plastic» pero aún no lo habíamos utilizado… al final nos decidimos. El plástico mágico es un material muy curioso pues es como una cartulina gruesa que cuando se calienta mucho, se encoge y se hace muy muy gruesa (7 veces más greuso).


Yo estaba cortando cartón porqué estoy preparando unas cajas y mis hijos empezaron a construir casas y hoteles con los trozos de cartón que yo iba descartando así que cuando saqué el plástico mágico para hacer colgantes, se pusieron a dibujar casas y hoteles… pero han quedado unos collares bien chulos!
Os explico como funciona:
1. Hacemos un dibujo en la cara rugosa del plástico mágico. Aconsejo que uséis rotulador permanente fino. Pensad que el plástico encoge aproximadamente un 45% su tamaño así que los dibujos tienen que ser tirando a grandes. Más abajo os pongo una imagen con antes y después para que os hagáis a la idea.
2. Lo coloreáis. Podéis usar lápices de colores o rotuladores.
3. Lo recortáis intentando que no queden muchos angulos y hacéis agujero si queréis luego usarlo de colgante para un collar, pendientes, llaveros… También podéis dejarlo tal cual y después pegarlo en unos clips para el pelo. Una taladradora de papel hace un agujero con un tamaño perfecto una vez encogido.
4. Ponéis los dibujos en el horno pre-calentado a 170ºC. Proteged la bandeja con un poco de papel de plata o papel vegetal. Veréis que los dibujos empiezan a retorcerse y a encoger.

5. Pasados un par de minutos, veréis que el plástico vuelve a aplanarse y ya no se encoge más. Es el momento de retirarlo del horno. Para que quede bien plano, colocarlos con cuidado sobre una superficie plana y presionar encima con otro objeto (yo uso la tabla de cortar). Si habéis usado rotuladores, puede que la tinta esté algo fresca así que cubrir la superficie dónde dejéis el plástico con papel de plata y poned la parte pintada en contacto con éste.
¡y en un momento tenéis pequeñas piezas de plástico con los dibujos de los peques!
Para que os hagáis a la idea de cómo reduce el plástico, aquí tenéis el antes y el después. Nuestros plásticos son tamaño dinA6 (una cuarta parte dinA6) y si lo usáis entero, obtendréis un plástico como el colgante rosa (un buen tamaño para un colgante).

Si los dibujos son más bien alargados, podéis hacer un agujero en casa extremo y preparar pulseras. Sin agujeros, podéis pegarlos a imanes, clips… en fin, que podéis personalizar cualquier cosa. Eudald (9) se preparó también unos carnets para jugar… uno para cada hermano… y le encantan porque son ahora muy gruesos y resistentes. La verdad es que les gustó mucho y ahora estamos preparando más… ¿os animáis? 
EDITO: Belén de ExperCiencia ha hecho una aportación muy interesante y es que ¡no hace falta comprar plástico mágico! podéis usar plástico marcado con el 6 (o 06, lo encontraréis dentro de las 3 flechas del icono de reciclaje). El plástico marcado como 6 está hecho de poliestireno, un polímero termosensible, que os funcionará igual de bien que el que podéis comprar 😉